Baile de sillas
El baile de las sillas representa
el fin de fiesta más esperado por los solteros como alternativa para conocer
diferentes facetas de los compañeros de fiesta.
Se necesitan varias sillas, una menos que el número total de participantes. Se colocan formando un círculo y los participantes esperan de pie a que comience la música situados en la parte exterior del círculo. Al oír la música, los solteros empiezan a caminar alrededor de las sillas bailando, concentrados en la música, dejándose llevar por ella. Cuando el árbitro lo considere oportuno (el árbitro generalmente es el organizador de la fiesta) parará la música y los solteros tendrán que sentarse cada uno en una silla. El que se quede de pie sale del juego. Se saca una silla del círculo, empieza la música de nuevo y continúa el juego. El siguiente soltero descalificado abandonará la fiesta con el que esperaba, así hasta que quede un participante.
Esa noche el ganador no abandona la casa en la que se encuentra sino que se queda y baila con el habitante de ella diferentes danzas, descubriendo sus movimientos, sus preferencias, sus habilidades y torpezas. Además de los numerosos descubrimientos que le sorprenderán durante la noche, el ganador recibirá más sorpresas por la mañana.
Se necesitan varias sillas, una menos que el número total de participantes. Se colocan formando un círculo y los participantes esperan de pie a que comience la música situados en la parte exterior del círculo. Al oír la música, los solteros empiezan a caminar alrededor de las sillas bailando, concentrados en la música, dejándose llevar por ella. Cuando el árbitro lo considere oportuno (el árbitro generalmente es el organizador de la fiesta) parará la música y los solteros tendrán que sentarse cada uno en una silla. El que se quede de pie sale del juego. Se saca una silla del círculo, empieza la música de nuevo y continúa el juego. El siguiente soltero descalificado abandonará la fiesta con el que esperaba, así hasta que quede un participante.
Esa noche el ganador no abandona la casa en la que se encuentra sino que se queda y baila con el habitante de ella diferentes danzas, descubriendo sus movimientos, sus preferencias, sus habilidades y torpezas. Además de los numerosos descubrimientos que le sorprenderán durante la noche, el ganador recibirá más sorpresas por la mañana.